Infraestructuras verdes y azules en entornos urbanos
Los desafíos contemporáneos, como el cambio climático y la creciente urbanización, resaltan la urgente necesidad de un nuevo enfoque para la planificación del uso del suelo. Para agricultores, consultores de suelos y todos los profesionales relacionados con el suelo, es esencial comprender y comprender el concepto de Infraestructura Verde y Azul (IVB) en áreas urbanas y periurbanas. Lejos de ser meros elementos decorativos, representan una red vital de soluciones naturales que benefician no solo a los habitantes de las ciudades, sino que también contribuyen directamente a la vitalidad y sostenibilidad de los paisajes rurales circundantes (Chiesura et al., 2018; Lázaro Marín y Alcántara, 2021).
¿Qué es la Infraestructura Verde y Azul?
Las Islas Vírgenes Británicas (IVB) son una "red de áreas naturales y seminaturales inteligentemente planificada y gestionada" que brinda una multitud de beneficios ambientales y sociales (Chiesura et al., 2018, p. 1). Este concepto es ampliamente reconocido como un enfoque eficaz y rentable para abordar los desafíos ambientales y sociales actuales (Lázaro Marín y Alcántara, 2021; Smith et al., 2023).
Esta red consta de dos elementos:
- Elementos verdes: incluye espacios verdes públicos (parques, jardines históricos, áreas de juego, avenidas arboladas), áreas naturales protegidas (parques naturales, oasis, reservas) y espacios diseñados específicamente como parques agrícolas, bosques urbanos, huertos comunitarios, techos y muros verdes, y superficies permeables (Chiesura et al., 2018, pp. 1, 7, 10, 17, 19; Comité para el Desarrollo del Verde Público, 2017; Ferrand, 2010; Owuor et al., s.f.; Smith et al., 2023; WSL y Eawag, 2022). Para ustedes, como trabajadores del suelo, los parques agrícolas son particularmente relevantes porque se crean para preservar paisajes rurales históricos y potenciar la vocación agrícola de las zonas periurbanas, garantizando una producción agroalimentaria de calidad y otros servicios ecosistémicos esenciales (Chiesura et al., 2018, pp. 2, 21, 28).
- Elementos azules: denotan componentes relacionados con el agua: ríos, lagos, humedales, estanques e incluso zonas costeras y marinas (Chiesura et al., 2018, pp. 1, 10, 19, 22; Ferrand, 2010; Smith et al., 2023). Estas infraestructuras son cruciales para la gestión del agua de lluvia y la revitalización de los ecosistemas acuáticos (KAN, s.f.; Smith et al., 2023; WSL y Eawag, 2022). La implementación de sistemas de gestión de aguas pluviales al aire libre, como cunetas con césped o cuencas de retención con vegetación, permite la creación de nuevas continuidades naturales a la vez que integra el agua en el paisaje urbano (Ferrand, 2010, pp. 134, 135; KAN, s.f.). Todo el concepto contribuye a la visión de la «ciudad esponja», donde el agua de lluvia se absorbe y gestiona in situ, reduciendo la presión sobre los sistemas de alcantarillado y promoviendo la recarga de aguas subterráneas (WSL y Eawag, 2022, pp. 218, 219).
Múltiples beneficios para los territorios y sus habitantes
Las Islas Vírgenes Británicas (BVI) ofrecen una amplia gama de servicios que mejoran la calidad de vida y la resiliencia de los ecosistemas:
- Conservación de la biodiversidad y servicios ecosistémicos: Son esenciales para la preservación de la biodiversidad al proporcionar hábitats y corredores ecológicos. La protección de los polinizadores, en particular las abejas y otros ápodos, es un servicio fundamental para los ecosistemas y la producción agroalimentaria mundial (Chiesura et al., 2018, pp. 2, 19, 32, 39, 85, 87; WSL y Eawag, 2022, p. 221). Los humedales y ríos revitalizados, por ejemplo, contribuyen a la riqueza de especies acuáticas y terrestres y proporcionan recursos alimentarios vitales (WSL y Eawag, 2022, pp. 212, 226).
- Mitigación y adaptación al cambio climático: Las Islas Vírgenes Británicas (IVB) son herramientas eficaces contra el cambio climático. Reducen las islas de calor urbanas mediante el sombreado y la evapotranspiración, mejoran la calidad del aire filtrando contaminantes y gestionan las aguas pluviales para prevenir inundaciones (Bach et al., 2021; Chiesura et al., 2018, pp. 1, 19, 76; Smith et al., 2023; WSL y Eawag, 2022, pp. 219, 233).
- Protección del suelo y el agua: Promueven la infiltración natural del agua, protegiendo los suelos de la erosión y contribuyendo a la recarga de los acuíferos subterráneos (KAN, n.d.; Marinosci et al., 2018, p. 76; Comitato per lo sviluppo del verde pubblico, 2017, p. 387; WSL & Eawag, 2022, p. 219). Para los agricultores, esto está directamente relacionado con la fertilidad de la tierra y la disponibilidad de agua para los cultivos.
- Beneficios socioculturales y económicos: Estos espacios mejoran el bienestar físico y mental de los habitantes de las ciudades al proporcionar lugares para el ocio, la relajación y los deportes (Chiesura et al., 2018, pp. 10, 19; Ferrand, 2010, p. 95; Owuor et al., n.d., pp. 187, 188). También pueden apoyar la economía local promoviendo productos agrícolas locales y nuevas oportunidades de empleo (Chiesura et al., 2018, pp. 28, 426; Lázaro Marín y Alcántara, 2021, pp. 283, 327). En estos espacios también se pueden llevar a cabo proyectos educativos y de investigación, fortaleciendo el vínculo entre la naturaleza y la sociedad (Chiesura et al., 2018, pp. 6, 39, 84; Owuor et al., s.f., p. 193).
Desafíos y oportunidades futuras
A pesar de su potencial, la plena integración de las Islas Vírgenes Británicas (IVB) enfrenta varios obstáculos. Un desafío importante es la falta de integración de los espacios verdes en la planificación urbana local. La continua pérdida de tierras agrícolas y naturales debido a la urbanización también es una preocupación importante (Marinosci et al., 2018, p. 76).
Para superar estos desafíos, varias vías son esenciales:
- "Fortalecer la planificación y la gestión": La adopción de herramientas de gestión específicas, como catastros verdes, normativas verdes y planes verdes, es crucial (Chiesura et al., 2018, pp. 45, 46, 51; Comité para el Desarrollo del Verde Público, 2017, pp. 348, 369). La gestión diferenciada, que adapta las prácticas de mantenimiento a la función e intensidad de uso de los espacios, optimiza los recursos y promueve la biodiversidad (Comitato per lo sviluppo del verde pubblico, 2017, pp. 393, 394).
- Promover la colaboración y la formación: La coordinación eficaz entre los diferentes actores (administraciones, profesionales del medio ambiente, ciudadanía, empresas) es esencial (Donati et al., 2023; Lázaro Marín y Alcántara, 2021, p. 285; WSL y Eawag, 2022, pp. 222, 233, 237). La formación continua de los operadores y el desarrollo de protocolos técnicos para prácticas sostenibles (p. ej., reducción de pesticidas) también son vitales (Comitato per lo sviluppo del verde pubblico, 2017, pp. 349, 407, 415). * Involucrar activamente a la población: La concienciación y la participación ciudadana son fundamentales para la protección y la mejora del patrimonio verde. Esto incluye la denuncia de anomalías, la adopción de zonas verdes o la participación en proyectos de agricultura urbana (Chiesura et al., 2018, pp. 6, 84; Comitato per lo sviluppo del verde pubblico, 2017, pp. 355, 420, 424, 426). Los profesionales del suelo pueden compartir su experiencia para fortalecer los vínculos entre las prácticas agrícolas y la gestión de los espacios verdes urbanos.
En conclusión
La infraestructura verde y azul son soluciones basadas en la naturaleza que, si bien complejas, son esenciales para construir ciudades más resilientes y habitables que funcionen en mayor sinergia con su entorno rural. Al integrar estos conceptos en la planificación territorial y fomentar la colaboración transdisciplinaria, podemos construir colectivamente un futuro donde la naturaleza sea un pilar central de nuestro desarrollo.
Referencias
- Alberico, S., et al. (2018). Esperienze virtuose di pianificazione di area vasta in Piemonte. In Qualità dell’ambiente urbano – XIV Rapporto (ISPRA Stato dell’Ambiente 82/18) (pp. 276-278). ISPRA.
- Bach, P. M., Probst, N., & Maurer, M. (2021). Urbane Strategien zur Hitze-minderung. Wie wirksam sind blau-grüne Infrastrukturen? Aqua & Gas, 2021(10), 20–25.
- Chiesura, A., & Mirabile, M. (2018). Il verde pubblico. In Qualità dell’ambiente urbano – XIV Rapporto (ISPRA Stato dell’Ambiente 82/18) (pp. 190-201). ISPRA.
- Comitato per lo sviluppo del verde pubblico (MATTM). (2017). Linee guida per il governo sostenibile del verde urbano. MATTM.
- Donati, G., van den Brandeler, F., Bolliger, J., & Fischer, M. (2023). Une infrastructure bleue et verte efficace requiert des protagonistes connectés. Hotspot, 48, 17–19.
- Ferrand, J.-P. (2010). Guide de la trame verte et bleue du Schéma de Cohérence Territoriale Caen Métropole. Caen Métropole.
- KAN. (n.d.). Regenwater in stedelijk gebied [Folleto].
- Lázaro Marín, L., & Alcántara, A. (Eds.). (2021). Informe de las Jornadas Técnicas: Soluciones basadas en la Naturaleza para la conectividad y restauración ambiental en el marco de la Estrategia Nacional de Infraestructura Verde. UICN-Med.
- Marinosci, I., Munafò, M., Congedo, L., & Strollo, A. (2018). Infrastrutture verdi: Perdita di aree agricole, naturali e seminaturali. In Qualità dell’ambiente urbano – XIV Rapporto (ISPRA Stato dell’Ambiente 82/18) (pp. 268-275). ISPRA.
- Owuor, J. A., Whitehead, I., & De Vreese, R. (n.d.). Liberare il potenziale delle foreste urbane Sviluppare un piano d’azione locale per la forestazione urbana. European Forest Institute.
- Smith, V., Cook, L. M., & Oppliger, S. (2023). Umsetzung blau-grüner Infrastruktur weltweit. Was kann die Schweiz daraus lernen? Aqua & Gas, 2023(9), 16–24.
- WSL & Eawag. (2022). Blue-Green Biodiversity: What Switzerland can learn from the initiative.